domingo, 6 de noviembre de 2011

El Punto de Partida






Le vi sentado en la mesa de la cocina, mordía aquella naranja como si fuera lo último que iba a comer en la vida. En cada gota ácida, un poco de él, que volvía donde siempre había estado.
Eso soy yo, pensé, algo tan fácil de devorar, tan a mano, tan a punto de desaparecer, tan a punto de volver donde siempre había estado.